Notas Programa 6.- Cuadros de una exposición

Los Conciertos del Museo para las Familias

Música de cámara antigua, barroca, clásica y contemporánea

OAC del Excmo. Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife

Museo Municipal de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife
DOMINGO, 16 DE DICIEMBRE DE 2012 · 12:00 HORAS

CUADROS DE UNA EXPOSICIÓN
JAVIER LANIS, PIANO

En el concierto del domingo pasado pudimos explorar de la mano de Alfonso Sebastián Alegre las sonoridades barrocas y contemporáneas del clave. En esta ocasión escucharemos cómo el sustituto del clave como instrumento de teclado preferido por los compositores alcanza nuevas fronteras sonoras y formales. En efecto, el piano evolucionó técnicamente desde el prototipo florentino de Cristofori, el hameklavier, hasta un instrumento enormemente potente y versátil que impulsó a los compositores románticos y a sus herederos a explorar universos sonoros, tímbricos, polifónicos y formales nunca antes imaginados. En el concierto de esta mañana tendremos la ocasión de comprobar las posibilidades técnicas y expresivas de este instrumento.

En el piano, a diferencia del clave, el sonido se produce merced a la percusión de unos martillos en las cuerdas del instrumento. Estas están tendidas sobre una tabla armónica que vibra en consonancia con ellas al tiempo que amplifica y modula el sonido para conseguir el timbre dorado y cálido arrancado por el fieltro de los martillos al contacto, veloz y certero, con las cuerdas. El mecanismo del piano no cesó de mejorar con el paso del tiempo y las investigaciones de los constructores. Los pianos actuales son instrumentos de amplia sonoridad, velocidad y agilidad casi ilimitadas, infinidad de ataques, fraseos y matices dinámicos extremos desde el más apagado de los pianísimos hasta el más feroz fortísimo. Incluso el toque, la acción del pianista sobre el teclado, tiene infinidad de variantes que pueden modificar el timbre del instrumento desde las calidades aterciopeladas y envolventes propiciadas por el pedal izquierdo (due corde, una corda) hasta los masivos acordes orquestales apoyados por el pedal derecho que levanta los apagadores y libera las doscientas cuerdas del piano para que puedan vibrar plenamente.

Para que podamos apreciar todas esas calidades musicales y sonoras Javier Lanis nos presenta hoy dos obras básicas del repertorio pianístico gestadas en dos periodos muy distintos y distantes de la historia de la música. La sonata op. 31 núm. 2 fue compuesta por Beethoven en 1802 y publicada en 1803. Era una de sus sonatas preferidas hasta el punto de que la tocaba en concierto habitualmente. Algunos estudiosos de la obra del compositor de Bonn sitúan en esta obra la frontera hacia su segunda época quizá por la coincidencia de la composición de esta sonata con la escritura de la famosa carta dirigida a sus hermanos y más conocida como el testamento de Heiligenstadt. En ella Beethoven confiesa cómo su sordera le hace huir del mundo, de la gente; cómo ve modificarse su naturaleza bajo el peso de la desgracia y suplica al Altísimo alcanzar un solo día de dicha plena. No será difícil al oyente escuchar estas súplicas de Beethoven encerradas en los compases de esta sonata que oscila entre el anhelo desesperado y la furia intensa del genio enfrentado al mundo y a su destino.

Fue setenta y dos años después de la sonata de Beethoven, en 1874, cuando Modest Petróvich Músorgski compuso los Cuadros de una Exposición. En esta obra el compositor utiliza el esquema de la suite al que dota de contenidos descriptivos muy variados con la disculpa de la visita a una exposición de cuadros. Es un tipo de música programática que parte de imágenes, en vez de un texto literario, que son descritas musicalmente utilizando todos los recursos técnicos del piano. Para darle cohesión al conjunto utiliza un noble tema musical, el paseo, que aparece uniendo los distintos cuadros. Y entre paseo y paseo nos pararemos a contemplar la deformidad del gnomo, el viejo castillo ante el que canta un trovador, la carreta con dos bueyes (Bydlo), los dos polluelos bailarines, los viejos hebreos representantes de la riqueza y la pobreza, el bullicio del mercado de Limoges, las sombrías catacumbas, la legendaria cabaña de la bruja Baba-Jaga y su delirante forma de reloj sobre patas de gallina para terminar frente a la grandiosa puerta de Kiev en la que el piano tiene que emular el repicar de las campanas de todas las Rusias.

Esquema del mecanismo del piano actual

1) Tecla
2) Pilotín
3) Puente
4) Pilotín del escape
5) Palanca de escape
6) Tornillo de reborde del macillo
7) Rodillo
8) Brazo del macillo
9) Palanca de repetición
10) Cabeza de macillo
11) Empujador
12) Palanca del apagador
13) Apagadores
14) Cuchara de apagador
15) Apagador
16) Cuerda
17) Marco
18) Grapa
19) Enganche de la cuerda
20) Somier

Jesús Arias Villanueva, diciembre de 2012